miércoles, julio 26, 2006

Importa mucho... poquito... nada...

Una misma noticia (que la Justicia bonaerense desautoriza la práctica del aborto a una mujer con discapacidad mental que quedó embarazada como consecuencia de una violación -comentario personal: aberrante-) para Página 12 es la nota principal de tapa, para Clarín es una nota más de la sección Sociedad y para La Nación, definitivamente, no es nota.

viernes, julio 21, 2006

El "eje del bien"

Si hace tiempo que no escribo es en parte porque la computadora de mi casa está en reparaciones y en el trabajo no tengo oportunidad de hacerlo, pero también porque cualquier tema me parece banal al lado de la guerra en Medio Oriente y ésta me resulta suficientemente dolorosa como para dejarme mudo.

Ayer los diarios contaban que un misil de Hezbollah había matado a dos niños en Nazaret. La noticia nos daba sus nombres y sus edades, los humanizaba lo más posible, sólo faltaba que nos informaran cuáles eran sus juguetes preferidos. Ese mismo día el ejército israelí mató a 56 personas en el Líbano, 55 de ellas civiles, pero este dato no pasaba de ser una cifra: gente sin nombre y sin rostro. ¿Por qué esa diferencia en el enfoque? John Bolton, embajador yanqui ante la ONU, nos aclara que "Sería un error adjudicar equivalencia moral a los civiles que mueren por actos terroristas" con los que mueren como consecuencia de la lucha antiterrorista (AFP, 17/07). El hombre y su circunstancia: la vida humana no tiene un valor específico, éste depende de dónde mierda le haya tocado a uno tratar de llevarla adelante.

El secretario general de la ONU pide al Consejo de Seguridad que tome las medidas necesarias para lograr el cese de las hostilidades (iniciativa que será vetada por Estados Unidos, que ya vetó esa expresión de deseo en el comunicado conjunto del G8) y el embajador israelita se muestra indignado: "Estoy más molesto por lo que no ha dicho que por lo que ha dicho: ha omitido la palabra terrorismo que es el origen del sufrimiento al que está sometido el pueblo del Líbano". Bombardear a la población civil y matar a 55 inocentes para eliminar a un combatiente no es terrorismo, es una estrategia militar lícita, es el desagradable pero inevitable modo en que la civilización trata de llevar a los bárbaros la sublime bendición de la democracia... Disculpen si mis ideas no son muy claras o mi prosa no es muy elegante: estoy demasiado enojado y demasiado triste.

viernes, julio 07, 2006

Informe sobre el planeta Di-Erz

A pesar de perdurar algunas antiquísimas liturgias en viejos templos llamados iglesias, sinagogas o mezquitas, mi trabajo de campo indica que la religión predominante actualmente entre estos seres es la adoración al esfuerzo físico y sus ritos se llevan a cabo en modernos templos denominados gimnasios. Tal parece que en honor a un pasado lejano en que era necesario utilizar la fuerza para subsistir, y una vez que el avance tecnológico la hizo innecesaria, comenzó este culto en forma de juegos y competencias: un grupo de seres se congregaba para decidir quién era el más rápido, el más fuerte o el más hábil con su cuerpo. Sin embargo el devenir de los hechos y la cada vez más escasa interrelación social provocó el auge de estos templos en los que pueden encontrarse multitudes sin que se produzca intercambio personal alguno entre los concurrentes.

La misma tecnología a la que me refería llenó esos espacios de ídolos mecánicos especialmente diseñados para quitarle a la actividad física cualquier aspecto lúdico. Hay allí máquinas ideadas para que el devoto tenga que levantar un peso que irremediablemente regresa siempre a su origen y cintas sin fin donde los feligreses corren con vehemencia sin moverse jamás del mismo sitio. Lo llamativo es que los sacerdotes (personal-trainners) jamás hacen hincapié en los conceptos que estos aparatos simbolizan, a saber: la insignificancia de la propia vida y la vacuidad del universo todo, única forma en que se explicaría semejante ceremonia. Al contrario, insisten en la doctrina del "estar en forma", vestigio de aquellos tiempos en que había un entrenamiento para esos juegos rituales a los que ya casi nadie accede, siendo que la mayoría de la congregación, después de sudar la gota gorda en el templo, "está en forma" para sentarse 8 o 9 horas delante de una computadora, una caja registradora o un mecanismo de embalaje.

Espero que estos datos sean útiles a la Federación... y también espero que pronto me llegue el relevo y el traslado a ese planeta de los pececitos de colores del que me han hablado, donde se comunican telepáticamente y tienen orgasmos grupales.

lunes, julio 03, 2006

Cultura y Heducasión

domingo, julio 02, 2006

Último recurso

Hace rato que no aparezco por acá ni tampoco comentando en otros blogs. En ese tiempo pasaron muchas cosas incluyendo la rescisión del contrato de alquiler y la mudanza oficial a la casa que comparto con mi pareja, mis hijos y mi gata Noche (la gata más linda del mundo). Por supuesto para el resto del planeta eso tiene una importancia relativa si consideramos que el Estado de Israel dejó sin ningún tipo de energía a un millón de palestinos y que en las zonas de Indonesia donde no hay demasiado fuego hay demasiada agua, aunque de esta última gente mucho ya no se habla... Creo que no clasificaron para el Mundial.

Mientras tanto en Irak continúa una guerra que ya lleva más de tres años y nos tiene tristemente acostumbrados a leer noticias diarias en las que los muertos se cuentan de a decenas. El 18 de marzo de 2003 escribí, después de mucho tiempo sin hacerlo, un poema que surgió de la bronca y la impotencia. Lo llamé así refiriéndome a su último verso aunque sé que algunos lectores interpretaron el título de manera muy distinta.

Los misiles caerán sobre Bagdad
destruyendo reliquias del pasado,
ilusiones de un presente traicionado
y del futuro la posibilidad.

Perderán sus piernas los atletas
y los ojos y las manos los artistas:
el Pentágono y sus analistas
manejarán estadísticas concretas.

Los niños -que podrían ser mis hijos-
tal vez lamentarán no haberse muerto
y después, al final de la agonía

los cadáveres formarán bultos prolijos,
los políticos aplaudirán su acierto
y yo me evadiré con más poesía.

A veces quisiera no acertar así en mis predicciones... En fin, ahora que empiezo esta nueva etapa de mi vida espero publicar más seguido: Volveré y seré 1+ entre millones de blogueros.