martes, noviembre 01, 2005

Amigo de fierro

Revisando los titulares más anodinos antes de cambiar de página encontré éste y entré, simplemente, porque me causó curiosidad qué concepto tendría su autor sobre la amistad, considerando las circunstancias. Sin embargo, ya la primera frase me aclaró todo: ¡Qué entrega admirable!

Yo no debo ser muy buen amigo, porque por más que aprecie a una persona me reconozco incapaz de morir como consecuencia de los golpes recibidos por ella. (Espero que nadie se ofenda porque tomo en broma una noticia trágica, pero... ¡no puedo parar de reírme!)

7 comentarios:

Grismar dijo...

¿y serías tan buen amigo como para matar a trompadas al otro?
Tengo una duda, los que miraron sin meterse ¿serían también amigos o sólo parientes?

1+ dijo...

Grismar: Esa duda fue la que me llevó a abrir un titular de la clase que no suelo leer... Evidentemente, "amigo" es alguien que se emborracha con vos habitualmente, del mismo modo que "amor" es lo que siente el tipo que le pega a su mujer cuando al otro día (todos lo días) le pide perdón. Las palabras se gastan.
Más allá de las matanzas indiscriminadas (o selectivas) de las que nos enteramos a diario, también la gente se mata entre sí y porque sí; y eso es algo tan corriente que me permite separar la frase humorísticamente absurda de la misma información que contiene.
Es triste que sea así, pero es real.

Grismar dijo...

En un mundo donde se bombardea por la paz no hay duda que las palabras se gastaron. Pero cuando esas palabras cambian de significado ¿dónde queda el significado que tenían?
Sin ofender a nadie ¿en qué catzo podés creer si vivís en un lugar en el que desde que nacés te informan que hasta los frailes están pintados?

Cinzcéu dijo...

Asociaciones más o menos libres y extremistas: "Friends will be friends, when you're in need of love they give you care and attention"; "Cuanto más conozco a los hombres, más quiero a mi perro".

Anónimo dijo...

Bajo mi identidad canina adhiero a la misantropía de Cinzcéu y a los otros comentarios.
Por mi parte, la nota me trajo a la memoria el relato de unos conocidos que estuvieron viviendo en Tilcara y en Cafayate. Me contaron que allá no es extraño que un tipo largue su trabajo y su casa por una semana o diez días para ponerse en pedo. Cuando un hombre se ausenta por más de dos días y no aparece por ningún lado, ya todos saben que está "alzado" -así le dicen-, y como se trata de una costumbre bastante extendida, se tolera y hasta se prefiere que el alzado tome distancia, para evitar que la cosa termine mal, como evidentemente ocurrió en esa reunión.

Grismar dijo...

Cuando un perro se escapa unos días de su casa se dice que anda alzado, y que ya volverá. Todo tiene que ver con todo.

Anónimo dijo...

Curiosas correspondencias. Y eso que no he hablado de los finados que mordí: todos amigos.