domingo, enero 29, 2006

Fuerza Federal de Elite
(30 metros de suave seguridad)

Una noticia a la que Clarín le da relativa importancia (y de la que no pude encontrar referencias en Página12 ni en La Nación) informa sobre la existencia de un proyecto para crear aquí una fuerza de seguridad especial y autárquica al estilo del FBI yanqui, según supuesto asesoramiento de nuestros amigos del Partido Republicano.

Esta nueva institución estaría habilitada para actuar "de oficio" interviniendo comunicaciones privadas, bloqueando cuentas bancarias y accediendo a todo tipo de información sobre los ciudadanos, incluyendo la suministrada por "informantes o arrepentidos (...) valiéndose de la figura del testigo de identidad reservada". Combinando estas desmesuradas atribuciones con la reconocida idiosincrasia de nuestras fuerzas de seguridad existentes (de las que saldrían sus futuros efectivos) no tengo demasiados comentarios por hacer.

Lo único que se me ocurre es que, si sus agentes van a ser más caros de coimear que los actuales, esto se trata simplemente de una adecuación del sistema de seguridad a la desigualdad en la distribución de la riqueza que se aceleró durante las últimas décadas.

5 comentarios:

Cinzcéu dijo...

Yo quiero ser un testigo de esos que le dan otra identidad, una cuenta bancaria y una casa en Seattle, en medio de bosques y con vista al océano. ¿O no termina así?

Grismar dijo...

A mí me pone nerviosa eso de "identidad reservada" ¿se la reservan para qué?

1+ dijo...

Cinzcéu: Te ponen un sobrenombre y te dan un plan Jefes y una casilla en el Doke, con vista a las petroleras.

Grismar: No lo había pensado... Se la reservarán para volver a usarla indefinidamente en todos los casos que no sepan resolver.

Anónimo dijo...

Sin ir más lejos (porque, para decir semejante pavada, para qué ir más lejos), yo soy un tipo de identidad reservada...
Y me la reservo por si algún día tengo problemas de identidad y no encuentro nada potable en el mercado de personalidades de la calle Dorrego.

Cinzcéu dijo...

Me encantó lo de "te ponen un sobrenombre", jajajaja, me imagino una truchada con un sello de la Bonaerense y un cana que te dice: "vas a vivir en el Doke con un plan Jefes, ¿cómo te ponemos?, ¿Juanchi, Cabezón o Fierita?".